a) acercarse todo lo posible al vehículo que circula delante para poder verlo mejor.
b) adaptar la velocidad a las condiciones atmosféricas de visibilidad.
c) parar en la calzada, hasta que desaparezca la niebla.
Explicación
El gran inconveniente de conducir con niebla es que la visibilidad se ve reducida y que el pavimento puede ser resbaladizo. Como nuestra visibilidad se verá reducida deberemos adaptar nuestra velocidad a nuestro campo de visión y además circular con el alumbrado correspondiente.