
a) la mayor capacidad para controlar el vehículo.
b) la percepción de la conducción como algo peligroso.
c) la menor percepción del riesgo.
VER EXPLICACIÓN
Explicación
Muchos de los accidentes sufridos por los jóvenes se producen porque no evalúan adecuadamente las consecuencias de una conducta peligrosa al volante. Por ejemplo, algunos jóvenes no perciben el riesgo que supone circular por encima de los límites de velocidad establecidos o habiendo consumido alcohol.